Cosmética de Corea


El té coreano
es uno de los más ricos en beneficios ya que, a los que ya poseen las hojas del té de por sí, la tradición de enriquecerlo con frutas, hojas y especias de la medicina tradicional lo enriquece aun más si cabe. De hecho, los dos principales tipos de té coreano distan mucho del que conocemos en Europa, que es el chino.

Así, en Corea tenemos, por un lado, las infusiones de té con cereales, semillas o hierbas y, por otro, los preparados con agua malteada o licor. Algunas incluso carecen de plantas del té, a pesar de que todas acaben con el sufijo ‘cha’, que es el modo de indicar té en coreano.

En Jeju y las provincias del sur de Corea se cultiva el más famoso de los tés de Corea: el verde. Sus hojas se recogen frescas y permiten amplios efectos terapeúticos. Bautizado como Nokcha, este té se ha usado durante siglos como limpiador del rostro, así como base de mascarillas caseras al mezclarlo con yogur. Además, es un rico antioxidante para la piel.

Otro té con beneficios cosméticos es el de jengibre, que en Corea se llama ‘Saenggang-Cha’, y que está indicado sobre todo como relajante y antiestrés, e incluso la medicina tradicional lo ha usado para curar resfriados y mejorar la salud del hígado. Ayuda a una piel más relajada, evitando las marcas del estrés visibles.

La lista de tés es enorme: de membrillo, de albaricoque, de trigo… e incluso existe como bebida dulce de postre: el Sikhye, que si se deja fermentar pasa a tener unos pocos grados alcohólicos. Una forma de brindar con té que, seguro, pocos esperan.

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